El cliente ha acordado realizar pagos de forma periódica, ya sea mensual o anualmente, con el objetivo de obtener acceso continuo a un producto o servicio específico.
Esta modalidad de pago recurrente le brinda al cliente comodidad y continuidad en el uso del producto o servicio, asegurando así una experiencia constante y sin interrupciones.
Además, el pago recurrente puede ofrecer beneficios adicionales al cliente, como descuentos, actualizaciones automáticas o servicios exclusivos, creando así una relación a largo plazo entre el cliente y la empresa que ofrece el producto o servicio.