Aumentar la accesibilidad a un producto o servicio implica hacerlo más fácil de adquirir y utilizar para un mayor número de personas.
Esto se puede lograr a través de varios enfoques:.
1.
Simplicidad: Diseñar el producto o servicio de manera intuitiva y sencilla para que sea fácil de entender y utilizar por cualquier persona, independientemente de su nivel de habilidad o experiencia.
2.
Precio asequible: Ofrecer opciones de precios flexibles, como alquiler en lugar de compra, planes de pago a plazos o descuentos para ciertos grupos de personas, para que sea más accesible para un rango más amplio de clientes.
3.
Características inclusivas: Incorporar características que mejoren la accesibilidad para personas con discapacidades, como lectores de pantalla, opciones de contraste de color y ajustes de tamaño de fuente, para garantizar que todos los usuarios puedan disfrutar del producto o servicio.
4.
Distribución amplia: Ampliar los canales de distribución, tanto online como offline, para que el producto o servicio esté disponible en diferentes lugares y sea fácilmente accesible para los clientes.
5.
Servicio al cliente inclusivo: Capacitar al personal para brindar un servicio al cliente inclusivo y amigable, que pueda satisfacer las necesidades y preocupaciones de clientes de diversos perfiles y orígenes.
En resumen, aumentar la accesibilidad a un producto o servicio implica hacerlo más fácilmente disponible, comprensible y utilizable para una amplia gama de personas, lo que a su vez puede abrir nuevas oportunidades de mercado y mejorar la experiencia del cliente.